Indiscutiblemente hay un lenguaje que se entiende a la perfección entre tú y tu perr@ y es el amor incondicional que se tienen, ese que con solo una mirada traspasa cualquier idioma, pero si que es cierto, sobre todo al principio de vuestra relación, que a veces cuesta interpretar ciertas conductas, señales y expresiones de nuestr@ perr@ y en el Cooperblog de hoy vamos a darte algunas claves que podrán ayudarte a entenderle mejor.

Hay ciertos mensajes que cualquier persona interpreta fácilmente en la comunicación habitual con su perr@, cuando piden comida, cuando quieren salir a pasear, cuando sienten miedo en ciertas situaciones, cuando quieren atención, etc. Pero hay otras señales, sobre todo aquellas específicas del lenguaje canino, que hay que saber traducir, entre perros utilizan métodos comunicativos similares, pero hay que tener en cuenta la morfología y la cantidad de razas tan diferentes que existen, ya que hay algunos perros que no tienen rabo (lo tienen muy corto) o sus orejas tienen diferentes formas.

La manera más clara e ideal de saber los sentimientos de tu perr@ es leyendo su lenguaje corporal, a continuación señalamos los más comunes;

• Hambre: Generalmente acuden a ti y se comunican mediante el ladrido, este ladrido es característico por que los ladridos que denotan que tu perr@ tiene una necesidad, en este caso, comer, son ladridos cortos, agudos y con una intensidad alta. Se acercan a ti y te rascan con la pata, apoyan su cabeza en ti, y actitudes similares. Este tipo de conducta se refuerza a sí misma, porque generalmente el/la perr@ reclama atención y recibe comida, por lo que es mejor darle su comida del día las mismas veces, aproximadamente a las mismas horas, y no esperar a que tu mascota te lo pida.

• Mimo y cariño: Cuando tu perr@ se te acerca y te expone el lomo, la entrepierna o la barriga, mientras mueve su rabo está buscando que le acaricies. A veces tenemos nosotros mismos la necesidad de hacerle caricias y achucharle, pero no siempre ellos están dispuestos, por lo que es importante aprovechar y saber leer esos momentos en los que ellos te piden caricias y satisfacer su necesidad y la tuya. Vamos a comentarte algunas señales que muestra tu perr@ cuando eres tú quién va a darle caricias y él/ella no quiere. Si su cola no se mueve con alegría, si notas que se lame mucho el hocico, bosteza continuamente, si al rato se marcha o incluso si directamente no reacciona a tus caricias, son señales claras de que no quiere caricias en ese momento. Mejor respetarle.

• Miedo defensivo: Cuando tu perr@ siente miedo ante otro perr@, algo o alguien, generalmente se agacha, pone la cola entre las patas, las orejas hacia atrás, se lame el hocico y a veces se ponen boca arriba como señal de sumisión, su intención es decirle al otro sujeto que no le haga daño, que él/ella no se los hará.

• Miedo ofensivo: Inicialmente, ante otr@ perr@, o persona, gruñen, enseñan los dientes e intentan morder, las vocalizaciones van aumentando y se convierten en ladridos seguidos, con tono más grave y frecuencia alta, su lomo y cuello se erizan, orejas planas y pegadas a la cabeza y cola en vertical con movimientos temblorosos que indican desafío.

• Estrés o ansiedad: Normalmente los perros estresados o ansiosos se muestran intranquilos, empiezan a mordisquear muebles, paredes, zapatos y todos aquellos objetos que encuentre a su paso, así es como intentan liberar la tensión que tienen acumulada. Empiezan a aparecer las estereotipias, que son movimientos repetitivos constantes sin ningún fin, es decir, son comportamientos que realiza el/la perr@ en un momento determinado y con los que descubre que así se “relaja”, si consigue relajarse ante una determinada acción, como por ejemplo, morderse la cola, dar vueltas en círculos, cazar animales invisibles, ladridos incesantes, esto se convertirá en un hábito repetitivo. Otro síntoma de estrés es el relamido excesivo, y también notarás que tendrá dificultades para obedecer tus órdenes y prestarte atención. Si notas que jadea excesivamente en un momento en el que debería estar tranquil@ probablemente también esté estresad@ y necesita liberar tensión. En casos de estrés crónico se evidencia en su cuerpo, notarás una caída excesiva del pelo.

• Felicidad: El comportamiento más común que demuestra que tu perr@ está feliz es el movimiento de la cola, la cola se mueve de un lado a otro, si no tiene cola, hay otras maneras de que sepas que tu perr@ está content@, también abre ligeramente la boca para sonreír mostrando un poco la lengua, se le dilatan las pupilas, corretea a tu alrededor, muestra signos de juguetear incluso te incita a jugar, centra su atención en ti, le apetece estar contigo, suele ir a buscarte, se tumba y descansa junto a ti, busca mimos y caricias, dormir contigo es una prueba clara de que confía en ti y se siente agusto contigo.

El lenguaje canino es muy extenso, pero entender lo básico para que tengas una comunicación sana y eficaz con tu perr@ es ideal para su salud emocional y la tuya. Eso sí, como comentábamos al inicio, la comunicación más sana y eficaz que tu perr@ y tú podréis tener es el AMOR INCONDICIONAL.